Aspectos a tener en cuenta a la hora de cambiar la bañera por el plato de ducha
El cambio de la bañera por un plato de ducha es una decisión que supondrá una serie de beneficios.
Este cambio se notará desde el primer día con puntos positivos como el ahorro de agua que supone, aunque también perderemos alguna de las ventajas y comodidades de la bañera.
En este artículo conoceremos algunas de esas ventajas e inconvenientes relativos a este cambio y también qué aspectos hay que tener en cuenta en el momento de llevarlo a cabo.
Ventajas e inconvenientes de las duchas y las bañeras
Por qué elegir una ducha
Las duchas ocupan mucho menos espacio y se adaptan mejor a baños pequeños, por lo que realizando este cambio ganaremos en sensación de amplitud, especialmente si la estancia no es muy grande y se colocan mamparas de cristal.
Además, es una gran aliada de los ritmos de vida intensos, ya que el tiempo que una persona utiliza en ducharse tiende a ser bastante menor que cuando nos bañamos. También resulta mucho más fácil de limpiar, por lo que dedicaremos menos tiempo a esta tarea.
Decantarse por la instalación de una ducha puede ser una gran ventaja para las personas mayores. Un acceso más cómodo y la posibilidad de colocar sujeciones y agarraderas la convierten en un espacio más seguro. También para el acceso con sillas de ruedas para personas con minusvalías físicas. Actualmente existen platos de ducha en el mercado con sifones reducidos que permiten enrasarlo al suelo para que sea muy fácil el acceso con sillas de ruedas. En este caso deberás tener cuidado con la mampara para que permita un acceso cómodo.
Por qué elegir una bañera
Sin embargo, la bañera es un elemento bastante más utilizado para el aseo de los niños, ya que resulta más cómodo para los padres llevar esta tarea a cabo en un espacio amplio y más confortable para los más pequeños.
De la misma forma, para aquellos que les gusta sumergirse de un baño relajante, la ducha puede resultar un elemento menos atractivo, aunque existen kits de ducha y grifería que pueden convertir la experiencia de ducharse en un momento para disfrutar. También actualmente hay rociadores a pared o al techo con diferentes chorros de agua que ofrecen una experiencia muy placentera. Podemos añadirle cromoterapia mediante luz con diferentes tonalidades e intensidades.